Bonita escenografía: de fondo, una calle pintada en una tela oscura con una curiosa iluminación, y unas mesitas con farolillos que le daban al escenario un toque íntimo... Nacho desplegó todo su encanto con el pelo recién cortado con la timidez de un niño que ha llegado nuevo a la clase y no conoce a nadie y nos mostró su disco nuevo casi al completo. Nos obsequió tan sólo con dos o tres canciones de sobra conocidas entre las cuales destacó especialmente Dry Martini S.A., a juzgar por el clamor del público. Y de pronto se hizo la luz...y Nacho no volvió al escenario...una lástima. Sus compañeros tocaron con justicia: Aabraham Boba a los teclados y al acordeón, el bajo, el batería y el hombre orquesta que se pasó afinando todo el concierto sus ocho instrumentos, incluido banjo. Nacho dispuso de una acústica y otra eléctrica. Y eso fue todo, el hombre del traje oscuro se marchó por donde vino y...suponemos que se emborrachó por Valladolid...de hecho nos encontramos a Abraham Boba por la calle a altas horas de la madrugada...
La noche fue regada y coronada con abundantes vasos de cerveza que desembocaron en risas tontas pero divertidas muy aconsejables.
Antes de Nacho Vegas, tocaron sus teloneros: My Friendly ghost y yo me enamoré de ellos, de su concierto acústico de tres guitarras y una voz con melena oscura. Y es que en Valladolid...la música está creciendo...de hecho, voy a aprovechar para presentaros a otros dos grupos curiosos para una ciudad tan carca, rancia, convencional y monótona...maybe Valladolid is changing a bit!
Vamos...que muerta muerta la ciudad tampoco está...tan sólo hay que trasnochar con ella.
Un saludo, espero que disfrutéis esta música que os he presentado!!
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