En este entorno de protesta social me produce una cierta melancolía -yo soy así- volver a pensar en el Mayo del 68. En efecto, ¿a dónde llevaron los gritos de "imaginación al poder"? No a mucho quizás pero ¿acaso es necesario organizarse para protestar contra esta maldita (des)organización?
No se trta de formular propùestas, nadie las tiene. Primero hay que criticar, después destruir y así poder crear un "orden nuevo". pleno de libertades sociales. - Muy a la nietzscheana.-
Hola. Me parece muy bien que la gente proteste y, sobre todo, destruya las cosas más o menos establecidas. El problema que la inmensa mayoría de la gente que hay ahí no tienen ni puta idea de nada, no han leído en su vida ni tienen criterio propio. Éste es el problema real: lo fácil que es engañar y manipular a la gente. Con un acto en facebook o en tuenti o en twitter ya tienes a miles en la calle. Lo que se debería hacer es hacer -valga la redundancia- pensar a la gente. Mientras tanto, la mayoría de esa gente -con "buenas" intenciones (con comillas por lo ambiguo de esa palabra)- será,simplemente, un rebaño de ovejas que se dejan guiar por un pastor ficticio -como aquellos que profesan cualquier tipo de religion-.
ResponderEliminarUn saludo desde el Apartamento Stroszek,
Rodrigo.